Como en toda actividad, el transporte marítimo no es ajeno a los accidentes. En el pasado se podían atribuir a cuestiones meteorológicas, falta de información sobre las rutas marítimas y al error humano. En la actualidad, se han añadido otros aspectos como infraestructura defectuosa, negligencia, el mal manejo de cargas peligrosas, terrorismo, actos de guerra, etc.
México no ha estado ajeno a este tipo de inconvenientes como lo demuestran los siguientes casos de embarcaciones de carga.
1.- Uno de los casos más famosos fué el encallamiento del buque tanquero El Betula y su posterior derrame de 5,000 toneladas de ácido sulfúrico y de su combustible en 1993, causando serios daños a los ecosistemas marínos de las costas de Michoacán.
2.-Otro caso fué el encallamiento del buque APL Panamá (en la foto) en el puerto de Ensenada la madrugada del 25 de diciembre de 2005. Esto se debió a la impaciencia del capitán del navío que decidió ingresar al puerto a pesar de carecer de los remolcadores auxiliares para su ingreso seguro al mismo.
3.- Más recientemente el Maersk Diadema ha ingresado en esta lista al encallar en el puerto de Lázaro Cárdenas el 2 de septiembre de 2007. El motivo fue muy semejante al caso del APL Panamá, pero para fortuna de la empresa danesa el encallamiento no fué tan severo como del anterior y logro ponerse a flote la embarcación en un plazo de una semana.
En el caso del transporte de pasajeros, el encallamiento del Discovery en Punta Nizuc es el más reciente. Dicha embarcación causó daños irreparables en un largo tramo a la segunda barrera coralina más grande del mundo localizada en las costas de Quintana Roo.
Más allá del dato anecdótico, es importante tener estos casos en mente ya que cada uno de ellos ha dejado enseñanzas que debemos de considerar en el futuro todas aquellas personas que estamos ligados al transporte marítimo.
1.- Uno de los casos más famosos fué el encallamiento del buque tanquero El Betula y su posterior derrame de 5,000 toneladas de ácido sulfúrico y de su combustible en 1993, causando serios daños a los ecosistemas marínos de las costas de Michoacán.
2.-Otro caso fué el encallamiento del buque APL Panamá (en la foto) en el puerto de Ensenada la madrugada del 25 de diciembre de 2005. Esto se debió a la impaciencia del capitán del navío que decidió ingresar al puerto a pesar de carecer de los remolcadores auxiliares para su ingreso seguro al mismo.
3.- Más recientemente el Maersk Diadema ha ingresado en esta lista al encallar en el puerto de Lázaro Cárdenas el 2 de septiembre de 2007. El motivo fue muy semejante al caso del APL Panamá, pero para fortuna de la empresa danesa el encallamiento no fué tan severo como del anterior y logro ponerse a flote la embarcación en un plazo de una semana.
En el caso del transporte de pasajeros, el encallamiento del Discovery en Punta Nizuc es el más reciente. Dicha embarcación causó daños irreparables en un largo tramo a la segunda barrera coralina más grande del mundo localizada en las costas de Quintana Roo.
Más allá del dato anecdótico, es importante tener estos casos en mente ya que cada uno de ellos ha dejado enseñanzas que debemos de considerar en el futuro todas aquellas personas que estamos ligados al transporte marítimo.
2 comentarios:
Hola, me interesa saber si existe en México alguna asociación como la Agencia Europea de Seguridad Marítima (EMSA)que se dedique a investigar las causas de los accidentes marítimos y que publique estadísticas sobre lo mismo. Gracias.
donde se puede uno informar sobre accidentes marítimos al instante?
saludos
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